viva la numeración

Lo primero, que sino se me olvida, recomendar esta entrevista a Eric de Los Planetas - Lagartija Nick, que como cada vez que habla, no tiene desperdicio.

Supongo que como a todo el mundo, que una serie te guste mucho y tener que esperar hasta la siguiente temporada, me jode bastante.
Normalmente tampoco es un drama ( bueno, menos cuando veíamos "Lost" ) te fastidia quedarte ahí con el "cliffhanger" plantado en el morro, pero bueno, te cagas un poco en la serie, y a otra cosa mariposa.
Peeeeeeeeeeeero, hay excepciones, y yo hacía mucho tiempo que no tenía la "ne-ce-si-dad" de una nueva temporada de una serie como cuando acabé de ver "Severance" ( "Separación" ). ¿¿Alguien sabe cuándo va a volver??

Me daba un poco de pereza ponerme con ella porque entonces todavía no había visto Parks & Recreation (estoy en ello) y mi imagen mental de Adam Scott era la del panoli sin sangre de Big Little Lies, pero claro, aparte de que aquí está muy bien, a posteriori me puse con Parks & Recreation, y ya nos hemos reconciliado del todo, claro.

(sin spoilers, palabrita)

Que puta serie más loca y retorcida. Y eso que los primeros episodios me costó un poco entrar en la trama, pero una vez dentro ... imposible escapar ( guiño, guiño, codazo, codazo ).
El final de temporada, ese minuto final ... impresionante, me hizo incorporarme del sofá como igual no lo hacía nada desde el especial de Nochevieja de 1987.
Ya solamente ese planteamiento loquísimo de la "separación" me parece una maravilla, pero luego ese micro mundo dentro de la empresa .. el trabajo ( o no ), las recompensas, el vigilante, los diferentes departamentos, Turturro y Walken!! Es que además tod@s están increíbles.
Y esto ya solamente a un nivel "superficial", sin entrar a interpretar o analizar lo que supone como crítica tan ácida como exquisita hacia el mundo laboral, porque mucha tela que cortar ahí, eh .. ya solamente con la docilidad con la que asumen todo a cambio de un "caramelito" … madre mía, real como la vida misma.

Si metes en un gran saco The Office, Severance y Dilbert, creo que tienes ahí juntos todos los tipos de personas y comportamientos que te puedes encontrar en el ámbito laboral.

¿Y yo dónde estoy? Yo vivo en este meme:

Recuerdo cuando en alguna entrevista respecto al sello me preguntaban: ¿No te gustaría vivir de la música? Coño, pues claro, si tengo que estar tantísimas horas de mi vida dedicado a algo, que sea algo que me guste. Pero claro, VIVIR de la música, ni malvivir ni sobrevivir, que nos conocemos. Con sus 12 ( ¿14? ) pagas, vacaciones … que muchas veces parece que damos por supuesto que el trabajar en algo relacionado con la cultura supone un sueldo regulero, no tener horario fijo y casi tener que dar las gracias a San José Obrero todas las mañanas.

¿Cómo no iba a querer vivir de sacar discos de ese tipo? Por mí, y por los artistas, claro. Otra cosa es tener que renunciar a tus principios y ceder a editar cosas por pura supervivencia y pensando solamente en el retorno. Eso ya sí que tiene que ser una putada, eso y vivir buscando "los nuevos tal" para poder petarlo, que lo único que hace y ha hecho es saturar el mercado de grupos cortados todos por el mismo patrón.

Peeeero, como este tema laboral es infinito, desconecto con una recomendación musical.

Ha sacado nuevo disco King Creosote, un tipo que cuenta sus publicaciones por decenas (leo que es el disco "oficial" número quince pero que lleva publicados más de cien), y que solamente por el hecho de haber compuesto una de las canciones más BONITAS que conozco, esta "Bats in the Attic", merecerá siempre mi atención.

Veo que su anterior disco "oficial" es ya del 2016, el muy recomendable "Astronaut Meets Appleman", que además recuerdo que lo presentó por aquí de forma doble en el Jazzaldia, primero en un concierto matinal en el que estuve rodeado de niños de colonias veraniegas correteando por allí, y luego ya por la noche en el escenario de la playa.
En este nuevo I DES hay un poco de todo, canciones preciosas en su onda más acústica, y jugueteos electrónicos varios en la onda de aquel disco tan bonito que editó junto a John Hopkins. Preciosidades como "Dust" , "I Des", "Please Come Back.." o "Walter de la Nightmare", una maravilla que lo único malo que tiene es que el título me suena a Raphael de la Ghetto y me entra la risa floja cada vez que lo leo.

Creo que sobran un par de canciones para que sea un disco redondo, esa media horaca de drones al final, y un tema como "Susie Allen" que no aporta nada y resta más que suma, pero bueno, con tal de que siga editando discos así cada cierto tiempo, perfecto, que siga experimentando y probando cosas a su bola, que aquí estaremos para escucharlo.